Los primeros baños de Mundaka

mundaka 03

Joserra de la Mar nos manda este artículo que saldrá en el último número del fancine Vaga, que en un principio  iba a salir sin nada de surf pero que al llegar esta noticia a su redacción lo cambió todo.


MUNDAKA, AQUELLOS BAÑOS

 

Por Joserra de la Mar 

 

El Correo, 6 de Noviembre de 2022.

Entrevista a Txato Etxaniz sobre su libro acerca del turismo en Urdaibai.


El Correo - Para el próximo libro quedan los pioneros del surf y la ola izquierda de Mundaka , le decía la periodista.Txato Etxaniz - Raúl Dourdil fue el que cogió la primera ola en Mundaka, en 1968. etc.


Me baso en dos documentos para afirmar que no es seguro y más bien improbable que Dourdil fuera el primero en este comienzo del surf en Mundaka y por tanto no debe admitirse lo que Etxaniz dice al Correo, sección de Urdaibai.

 

  1. MATT WARSHAW, EN LA VOZ MUNDAKA DE SU ENCICLOPEDIA, afirma que no se sabe cuándo se hizo surf en Mundaka por primera vez pero que a finales de los sesenta había una comunidad de surfers viajeros, un network, que cogía la ola.Según esta información no es nada inverosímil que el primero de los pioneros extranjeros de Mundaka se metiera antes que Dourdil.

     

    Testimonio de esa comunidad de surfistas extranjeros lo da el artículo del editor de la revista Surfer en1978, Jim Kempton, que traduce Jesús Busto en el blog Desde la Croa:

     

    La primera vez que estuve en “Rivermouth” fue en 1971. Llevaba lloviendo en Francia desde hacía varias semanas, y algunos de nuestros amigos surfistas estaban enloqueciendo con la situación. Por eso decidimos coger nuestra furgoneta y dirigirnos hacia el sur. Teníamos apuntados en el mapa algunos posibles destinos, que pronto descubriríamos lo difícil que nos resultarían de encontrar. Pasamos medio día recorriendo carreteras y caminos que siempre nos llevaban a un lugar equivocado. Llovía y hacía frío. Cuando por fin alcanzamos nuestro destino, el mar estaba plato. Estuvimos durante una semana en aquel sitio y nunca vimos romper una ola.

     

    Vistos ambos testimonios y teniendo en cuenta que Kempton y sus colegas venían con el chivatazo, es decir, que tenían nombres de spots apuntados, situar el primer baño de algún surfista extranjero en Mundaka tres años antes del 71 no parece descabellado, más bien lo contrario.

     

    Quiero reflejar la idea de que el baño de Dourdil es un hecho aislado, no es como en otros baños, históricos, como el de Fiochi, o Elejoste, que han dejado una huella. Poco sabemos del hecho, y su influencia en el surf es mera anécdota, pues nadie le siguió. No sabemos si como en el caso de Fiochi y sus amigos, la memoria le ha hecho traición, y en vez del 68, fue al de unos meses, en el 69. Buscar ahora testigos cuando nada se ha sabido desde entonces parece una tarea fuera de lugar. Jesús Fiochi o Nito Biescas generaron un movimiento, dejaron huella. Por tanto sus relatos son verificables. Dourdil también pero no en Mundaka, su baño pasó desapercibido y por tanto es muy difícil datarlo o verificar la fecha y su consistencia.

     

    En 1956 había llegado el surf “de pie” al continente. En 1962 se organizó el primer campeonato internacional en Biarritz y pronto empiezan a pasar la frontera surfistas americanos y australianos, a veces de paso hacia Marruecos, como los australianos hermanos Gulley que llevaron el surf a Tapia de Casariego en 1968 y desistieron de seguir viaje cuando encontraron su edén en Asturias. Otros se quedaban en Biarritz en La Cote de Basques como Dora o Cabell con los que charlaban nuestros pioneros, o con la famosa Barre como meta, como Nat Young, que dio fama a la ola de la bocana de Bayona desde una portada de la Surfer. Y luego está la película de Witzig de 1969. Francia estaba tan de moda que hasta Kahanamoku hablaba de sus olas. Debía de haber cierto trasiego hacia la costa del otro lado de la frontera.

     

    Mundaka es una ola poco frecuente y en un lugar pienso que algo escondido para los viajeros en aquella época, fuera de la ruta de Sopelana o hacia Cantabria, hacia Portugal, o hacia

     

    Marruecos. Lo que pienso que explica en parte que la mejor ola de Europa tardara años en conocerse desde que el surf llega a Sopelana, por ejemplo, en junio de 1964. Kempton en la Surfer de 1978 lo ilustra, ahí está su artículo completo en el blog de Jesús Busto, pero reitero el párrafo:

     

    Pasamos medio día recorriendo carreteras y caminos que siempre nos llevaban a un lugar equivocado. Llovía y hacía frío. Cuando por fin alcanzamos nuestro destino, el mar estaba plato.

     

    Eran otros tiempos.

     

    Hay otro factor que en mi opinión explica el retraso. Hay que pensar cómo era el surf de la época. Es en otoño de 1966 cuando Nat Young, asiduo como digo de la costa vasco francesa, (por cierto, quizá diga algo en su biografía de si cruzó la muga), comenzó con su triunfo en Los Ángeles la revolución de las tablas cortas. Pienso que la ola de Mundaka para los surfistas de los primeros sesenta, si alguno la vio entonces, cuando los longboards, era un cerrote. Desde luego que lo sería para Dourdil en el 68 si usaba todavía la tabla de Prat. Mundaka era para la Surfer la spanish Maalea, aquella ola que encandiló a Owl Chapman porque decía que corría más que en Sunset. Warshaw dice en su Enciclopedia que aunque a esa derecha, vertiginosa como la de Mundaka, entró gente con tablones en los primeros sesenta no se comieron nada y no se empezó a surfear en realidad hasta la revolución de las tablas cortas. Lo mismo pudo ocurrir en Mundaka, un calco de la ola hawaiana.

     

     

    La tabla de los Prat

    La tabla de los Prat


     

    Alucinarían nuestros pioneros al ver que esa ola era practicable. Hasta entonces las olas huecas y rápidas no eran plato de gusto. Pipeline no se hace hasta 1964 y por Phil Edwards, nada menos, en un baño histórico.

     

    Parece que sí. Que Dourdil tenía un tablón de los varios que hizo el padre de los Prat. Otra la tenía Estanis Escauriaza cuando Jon Susaeta entró por primera vez al agua en 1968 con su flamante tabla nueva, también un tablón, pero con otra hechura, y se encontraron en la orilla. Estanis se la hubiera cambiado de mil amores.

     

    La tabla con que Susaeta empezó en 1968
    La tabla con que Susaeta empezó en 1968

     

     

    No dudo de que Raúl se metiera en Mundaka, pero no debió de coger nada con su tablón. Quizá ni siquiera se metió en el pico bueno, sino en el Txorro o a la derecha o un día pequeño de los que no sale la famosa ola. Es decir, no en la famosa ola izquierda, como se la conoce en los medios. Decir que fue el primero que cogió la ola izquierda de Mundaka, como les gusta llamarla a los periodistas, es mucho decir, porque entrar en Mundaka no significa coger la ola. Y porque por el testimonio de Warshaw yo no afirmaría tajantemente que fuera el primero. Repito, no tanto porque no sea cierto que entró con una tabla en 1968.

     

  2. El segundo testimonio que manejo es el de LA ENTREVISTA QUE HICE A JON SUSAETA hacia 2001 para Surfer Rule. Aquellos surfistas cantábricos de los sesenta eran una piña, eran como hermanos. Raúl se iría luego a Casa Lola a vivir como un hippy con Letamendia, Beraza y Merodio y creo que con Jon y otros de surfari hasta Agadir en seiscientos, dos seiscientos. Sabían al dedillo las andanzas de cada uno.

     

    Ocurre que Jon contó entonces a Surfer Rule que hacia el 70 o 71 Raúl y los de Bakio les narraron, les dieron la noticia, de lo maravillosa que era Mundaka. Les contaron además que habían empezado a coger Mundaka unos americanos. Y también que ellos todavía no se habían metido. Está publicado así. Jon afirmó en su entrevista que él y sus amigos de Sope no se lo creían, pensaban que en Mundaka no había olas de surf. Y Jon me explicó que él y sus amigos entraron a menudo y durante toda la década desde entonces. ¿Quizá el baño de Raúl fue tan birrioso que ni se lo comentó a sus colegas de Sope y por eso Jon no lo conocía? No parece un olvido de Jon. Quizá no le dio la importancia que ahora se le está dando.

     

    En cualquier caso, el baño histórico y seguramente anterior es el de los americanos, el de la comunidad de viajeros que menciona Warshaw, aunque nos estropee el relato. Nos lo estropea porque no se puede datar ni poner nombre y apellidos, vascos ni no vascos. No lo hicieron para pasar a la historia.

     

    Imagino que aquellos surfistas ya sabían pillar una pared como la de Mundaka y tenían pinchos, o al menos tablas más ligeras y estrechas y con más punta, tablas adecuadas para ello. Eso sí que debió de ser un momento emocionante.

No hay comentarios:

Anímate a participar en Surf 30, pero siempre con respeto.

* Los comentarios reflejan solo las opiniones de los lectores.

* No se aceptarán comentarios que puedan ser considerados difamatorios, injuriantes, de mal gusto o contrarios a las leyes.

* No se aceptarán comentarios con contenido racista, sexista, homófobo o que puedan interpretarse como un ataque hacia cualquier colectivo o minoría por su nacionalidad, el sexo, la religión, la edad o cualquier tipo de discapacidad física o mental.

* Los comentarios no podrán incluir amenazas, insultos, ni ataques personales.

Se eliminarán aquellos comentarios que estén claramente fuera del tema de discusión, que sean publicados varias veces de manera repetitiva (spam) o que incluyan enlaces publicitarios.

Si tienes alguna duda, consulta a surf30@gmail.com

Con la tecnología de Blogger.