Si creías que lo habías visto todo en el surfing estas imágenes te harán ver que estás equivocado, o por lo menos yo no había visto algo semejante.

Pongámonos en situación. Kirra esta semana estuvo rompiendo a la perfección. El día en cuestión, con olas de un par de metros, un surfista intentó pinchar la ola. No tengo claro si al surfista en cuestión se le fue la tabla o la tiró porque la ola le iba a tragar, aunque me inclino por la primera opción.

El hecho es que la tabla salió volando justo cuando otro pillaba esa misma ola, quedando entre el surfista y su tabla.

En un primer momento el segundo surfista aguantó de pie mientras arrastraba al otro surfista y a su tabla, hasta que finalmente la tabla se partió en dos y finalmente cayó.

Al parecer no hubo más daños que una tabla partida, pero podía haber sido peor, mucho peor.

Una gran marejada golpeó el Gold Coast a finales de la semana pasada y Kirra fue el lugar elegido por todos los que intentaban obtener el tubo de su vida.

No hay que tomarse Kirra en broma, porque el riesgo frente a la recompensa es muy real.

Con un swell realmente sólido golpeando el Gold Coast, Coolangatta ofreció muchas posibilidades y Kirra volvió a ser el lugar preferida para surfear con olas largas y limpias.

No es muy común ver una marejada tan grande en el último tramo de la primavera austral, pero así sucedió ayer.

Un potente swell del sureste ha golpeado hoy la costa de Coolangatta creando en Kirra olas largas y tubulares.

El 95% de los point breaks de costa este de Australia son derechas. Un sueño para los regulars pero una pesadilla para los goofys. ¿Pero, qué pasaría si Gold Coast estuviera en la costa oeste de Australia? Si fuese así Kirra rompería de esta forma.