El pasado 3 de mayo, con todos los pros que iban a participar en el Challenger Series, una buena marejada con la dirección indicada rompió en Superbank bajo una suave brisa.
De las abarrotadas olas de Superbank, Australia, viajamos unos cuantos miles de kilómetros para llegar a las Mentawai, donde se pudo disfrutar de un baño con tan solo tres perseonas en un caramelito de ola como Nipussi.
El buen tiempo,las olas buenas y fáciles, y el agua cálida, hizo que los surfistas salieran como champiñones en Superbank. Si creías que un día en el trabajo iba a ser estresante, intenta pillar una ola allí.
Fue el día después de las devastadoras inundaciones que han asolado la zona. El swell se limpió durante la noche pero el agua estaba sucia debido a los grandes deslizamientos de tierra.
Es una de esas costas que todo el mundo conoce, o así lo creemos: una hermosa franja de playas de arena blanca, promontorios de rocas de lava negra y tubos increibles que rompen en una espiral azul verdosa.
Sin embargo, esta es una zona en constante cambio, que depende del flujo de arena, los cambios climáticos estacionales y las mareas humanas que llegan atraidas por el mar.
El paisaje de ensueño de Goldie atrae a personas de todo el mundo, y su estatus en la cultura del surf tiende a hacernos olvidar el hecho de que para muchos surfistas, es simplemente su hogar. Generaciones de surfistas han crecido aquí: algunos se han vuelto famosos, algunos son más que famosos, unos pocos son 'inmortales', pero dependiendo de su edad y edad, todos tendrán historias que contar. Quizás del día en que vieron a Michael Peterson surfear un perfecto Kirra Point. Tal vez el día en que Steph Gilmore, con tan solo 15 años, les hizo flipar. Tal vez del día en que vieron por primera vez Superbank romper perfecto, o del día en que tuvieron la mejor ola que jamás hayan surfeado. Porque en este lugar todo eso es posible.