Durante años, el realizador Chris Bryen ha estado persiguiendo la toma perfecta de la ola más violenta del planeta, Shipsterns Bluff, y finalmente lo ha conseguido.
Tim Bonython es uno de los realizadores más renombrados de Autralia, incapaz de resistirse a presenciar en primera persona las olas más grandes y temibles del planeta. Y no creo que haya una más terrible que Shipstern Bluff, Tasmania.
Me encanta la ola del segundo 15, con el tío saludando como si estuviera dando vueltas en el tiovivo del parque de su pueblo, y no en Shipstern's Bluff.