Pocos son los realizadores que se atreven a combinar música clásica y olas grandes, y lo cierto es que el resultado es más que interesante.



Hace unos días una gran marejada barrió la costa este de Australia. Fueron muchos los surfistas que se concentraron en esta ola cerca de Sydney en busca de emociones fuertes.

Música:
Juan Sebastian Bach
With Some Malice - Francesco D'Andrea

Medios generalmente ajenos al mundo del surfing cada vez parecen más interesados en este deporte. Es el caso de HBO, que vuelve a tocar el surfing con la serie '100 Foot Wave'.

Dirigida y producida por Chris Smith y producida por el ganador del Emmy Joe Lewis, la serie de seis capítulos de HBO se centrará en ell pueblo de Nazaré y en la figura de Garrett McNamara, quien hará de conductor de la historia que relata el cambio que ha habido en el surf de olas grandes en la última década.

Durante décadas, la ola más grande jamás surfeada fue un monstruo legendario de 35 pies, unos 11 metros, cogida por Greg Noll en 1969 en Oahu. Los surfistas repitieron el viaje de Noll, discutiendo si una ola podría alcanzar mayor altura, de ser así, si un humano realmente podría surfearla.

A medida que los surfistas exploraban el planeta, finalmente fueron descubriendo algunos lugares para superar ese record: en California, en Baja, en Maui. Luego vino Nazaré.

McNamara, quien llevaba tiempo ostentando el récord mundial Guinness de la ola más grande jamás surfeada, fue fichado en 2010 por una banda de lugareños portugueses que esperaban averiguar si las olas gigantescas que habían observado cerca de la costa de Nazaré podían surfear.

Desde un faro abandonado hace 500 años pudieron observar la ola más grande que habían visto nunca. Tanto fue así que McNamara y su mujer se mudaron a esta localidad portuguesa en 2010.

Ahí comienza la historia.

La serie se podrá ver a partir del 18 de julio de 2021 en HBO.

Sí, todo el mundo conoce Dungeons, la impresionante derecha que puso a Sudáfrica en el mapa de las olas grandes a finales de la década de 1990. Pero, ¿sabías que el cercano Sunset Reef es una ola más perfecta y donde realmente comenzó el surf de olas grandes en Sudáfrica?

Behind the Peak es una breve mirada a la historia de estas dos olas tremendamente diferentes que han producido algunos de los mejores surfistas de olas grandes del mundo. Según Grant Twiggy Baker, tres veces Campeón del Mundo, ninguna de las olas ha estado cerca de su máximo potencial todavía y lo mejor está por venir, especialmente en Sunset."Existe la oportunidad de conseguir un tubo alucinante en una ola realmente grande", reconoce Twiggy, quien dice que el lugar es capaz de producir tubos que se podrían comparar con los de Jaws. "Uno de nosotros lo hará pronto, pero una vez que llegue a los 20 pies o más, se convertirá en una gran ola realmente peligrosa".

Mientras John John Florence descansa en Hawai intentándose recuperar de su lesión de rodilla, su hermano Nathan disfruta de una larga estancia en Puerto Escondido como centro de mando en busca de olas grandes y tubos profundos.

El pasado 16 de marzo se cumplió el noveno aniversario de la muerte en aguas de Mavericks de Sion Milosky. Milosky era un surfista relativamente desconocido en el panorama internacional. Era de esos tipos que le da igual en qué trabajar si con ello se podía pagar sus surfaris.

Había sido surfista profesional de tablón pero lo que le gustaba realmente eran las olas grandes, las más grandes, como buen hawaiano que era.

Todo fue un cúmulo de coincidencias hasta llegar a ese trágico final. Hacía unos 10 años se tomó un descanso para poder criar a sus dos hijas, pero el gusanillo de las olas grandes le hizo volver al agua.

Un mes antes de su muerte le nombraron el mejor surfista underground del North Shore después coger a remo algunas de las mayores olas de la temporada.

Usó parte de los 25.000 dólares del premio para viajar a Santa Cruz junto con su amigo Nathan Fletcher y poder así surfear Mavericks durante el mayor swell de la temporada.

Según cuentan los presentes, todo iba bien, las olas superaban los diez metros y ya había cogido varias olas. Casi al final de la sesión, Milosky cayó al intentar surfear la primera ola de la serie y desapareció con las siguientes. Primero apareció su tabla, y veinte minutos después encontraron su cuerpo ya sin vida.

Los tres días de calor y olas grandes también llegaron a las costas de Las Landas convirtiendo otra vez más a Hossegor en la capital de los tubos.

“Todo se mueve en círculos y el océano nos muestra lo pequeños que realmente somos dos veces cada siglo. La tormenta saldrá de la Antártica, rasgando el Pacífico, y enviará una fuerte marejada 2.000 millas hacia el norte. Y cuando alcance Bells Beach habrá las olas más grandes que haya visto este planeta. Y yo estaré allí.”

Esta es una de las últimas secuencias de Le llaman Bodhi, cuando Johnny Utah (Keanu Reeves) después de perseguir a Bodhi(Patrick Swayze) por todo el planeta le detiene en Bells Beach pero le permite entrar al agua para surfear la mayor marejada de los últimos 50 años.


Lo curioso de esto es que en la realidad la secuencia no se filmó en un lugar tan exótico como esta playa australiana si no en Cannon Beach, Oregón, lugar dónde seis años antes se grabó "Los Goonies", una de las películas que más éxito tuvo en la década de los ochenta.

¿Pero entonces, esa enorme ola fue filmada en Oregón? Pues no. Esta es la mágia del cine, que se puede cortar y pegar a placer para generar la ilusión. En Oregón solo se filmó las escenas de la orilla, la escena en el que Bodhi es engullido por una enorme tuvo lugar en Waimea Bay.

Darrick Doerner, surfista de olas grandes, se tiró a propósito en una ola de casi siete metros en Waimea tan solo para que la película tuviera el final que merecía.

¿Curioso, no?

El objetivo de Billy Kemper después de su grave lesión en Marruecos era solo uno: "estar preparado para volver a surfear Jaws".

Después de una intensa rehabilitación Billy Kemper se siente preparado otra vez para surfear olas grandes. Solo hay que esperar la llegada de una gran marejada.

En "Cold Comforts", el realizador Peter Clyne se adentra en el gélido mundo del surfista irlandés de olas grandes Conor Maguire, donde las condiciones invernales más duras se juntan, a veces, con los mejores días de surf de olas grandes en rompientes legendarias como Mullaghmore.

Fueron muchos a los que esta marejada les cogió por sorpresa en la zona de Los Angeles, California. Sabían de su llegada, pero no esperaban que dejara olas tan grandes.Fueron unas cuantas horas de olas grandes, en su mayoría cerrotes, pero no todas. Hubo algunas que dejaron momentos espectaculares.

Después de operarse la cadera y la rodilla para reparar el ligamento cruzado anterior, el ligamento cruzado anterior y un menisco desgarrado, el quinto capítulo "BILLY" sigue el intenso viaje del campeón mundial de olas grandes Billy Kemper a través su recuperación para tratar de volver otra vez al surfing.

El surfista Danny Griffiths ha podido recucuperar cuatro años después la tabla de surf que perdió mientras surfeaba en Pedra Branca.

Griffiths perdió su tabla de surf favorita en 2017 en Pedra Branca, una isla rocosa aislada a 27 kilómetros al sur de Tasmania, que alberga una de las olas grandes más famosas de Australia-

"Éramos unos cinco surfeando, y en mi última ola, tuve que saltar al final ya que era una de las olas más grandes del día y me iba a cerrar", dijo. “Tuvimos un bote y un par de motos de agua buscándola durante dos o tres horas hasta que finalmente desistimos".

"Normalmente puedes encontrarlas con bastante facilidad debido a sus colores brillantes, pero nunca la volví a ver".

Griffiths siempre se había preguntado dónde debió terminar, y casi cuatro años después, el misterio se ha resuelto.



La tabla estuvo a la deriva durante aproximadamente 16 meses antes de ser recogida por un par de pescadores en Magnetic Island, cerca de Townsville, en el norte de Queensland.

Troy y Beau Breed, la recogieron en su barco con muchos percebes pegados en los cantos, creciendo sobre ella durante su viaje, se calcula, de 4.000 kilómetros a la deriva.

Los pescadores intentaron encontrar al dueño a través de las redes sociales, pero no tuvieron suerte.

Pero el destino hizo que volviera a él cuando los padres de uno de los pescadores visitaron Tasmania y, por casualidad, mencionaron a algunos surfistas locales que sus hijos habían encontrado una tabla de surf allí.

“Sus padres estaban en una caravana por Tasmania y empezaron a hablar con un par de surfistas locales en la costa oeste acerca de que sus hijos habían encontradoencontraron una tabla de surf mientras estaban pescando”, dijo Griffiths a Guardian Australia. “Dado que Tasmania es un estado bastante pequeño, todos se conocen. Solo hicieron falta unos pocos surfistas para darse cuenta de que era mío y me enviaron algunas fotos para confirmarlo".



Griffiths dijo que reconoció la tabla porque era de un color verde brillante y estaba hecha por un pequeño shaper de Tasmania que se especializaba en tablas de olas grandes. Los hermanos de Queensland ahora están preparando la tabla para enviársela.

“Incluso con los percebes, lo supe de inmediato”, dijo Griffiths. “Todas mis tablas de olas grandes son de color verde flúor y no hay muchos surfistas de olas grandes en Australia. Todos se ponen las cinchas de forma diferentes".

“Creo que los hermanos lo colgaron en la pared durante los últimos dos años, como trofeo. No surfean. No es el tipo de tabla de surf que puede usar un surfista en general. Está construido con un solo objetivo, surfear las mayores olas posibles".

Edward Doddridge, un oceanógrafo del Instituto de Estudios Marinos y Antárticos, le dijo a ABC Tasmania, donde apareció la historia por primera vez, que la tabla no pudo haber viajado por la costa este de Australia, sino que “debió haber recorrido el camino más largo” a través de Nueva Zelanda. .

“La gran corriente que llega a lo largo de la costa este de Australia va de norte a sur, lo que significa que esta placa debe haber venido de otra manera”, dijo a ABC. “Debe haber ido hacia el este desde Tasmania y luego hacia el norte a través del medio del Océano Pacífico y luego regresar hacia la costa australiana".

La sesión en Mundaka del pasado sábado 13 de marzo comenzó con olas grandes.Sin embargo, en cuanto llegó la bajamar y empezó a subir la marea, disminuyó el mar contra todo pronóstico. A pesar de no haber sido un día perfecto, se disfrutaron de buenas olas.

Vídeo: Carlos Dambo

Mikel Gasca nos deja algunas imágenes del complicado baño de ayer en Donosti, con olas grandes y mucho viento de tierra.

La nueva serie del WSL nos muestra la vida del cuatro veces ganador del campeonato de olas grandes en Jaws, campeón del Mundo de Olas Grandes 2018, y padre de cuatro hijos, Billy Kemper.

Narrado por Selema Masekela, una de las voces más conocidas en los vídeos de deportes de acción, 'Billy' sigue a Billy Kemper en su objetivo de surfear olaas cada vez más grandes.

"Esta es una historia de cuando lo que amas amenaza con apartarte de quien amas", explica Masekela.

En 2019, Kemper se encontró en el punto más alto de su carrera después de ganar el cbdMD Jaws Big Wave Championships, su cuarta victoria en Maui, pillando la ola de su vida en Jaws, para luego seguir con una victoria en el Sunset Open.

Pero eso no era suficiente para Kemper, y quería mantener la racha.

Manteniendo siempre un ojo en los partes de olas, Billy se fue a Marruecos junto con Koa Smith y Luke Davis en febrero de 2020.

"En cuanto a las consecuencias, no creo que supiéramos realmente lo que podría pasar hasta este viaje", explica Kemper.

En este episodio veremos a Smith, Davis y Mark Healey, junto con su guía local Jerome Sahyoun, mientras el equipo surfea una derecha de barril perfecta y vacía, un slab llena de escalones y una izquierda acogedora tan pronto como aterrizaron en Marruecos.

Se divirtieron mucho. Tanto, que decidieron quedarse para el siguiente swell. Ahi fue donde todo cambió.

Dos surfistas fueron rescatados a primera hora de la tarde de ayer en la playa de San Lorenzo, Gijón al verse arrastrados por la corriente en la zona de San Pedro.

La Policía Local de Gijón recibió una llamada que alertaba de la presencia de dos surfistas frente la iglesia de San Pedro con dificultades para salir del agua. En ese momento las olas grandes, la pleamar, y las mareas vivas, habían provocado una fuerte corriente en la zona.

Rápidamente se desplegó un amplio dispositivo de emergencia en el que participaron los bomberos y la Policía Local. El helicóptero del Servicio Marítimo despegó del puerto de El Musel y se trasladó hasta el lugar del suceso, si bien no llegó a intevenir.

Los bomberos, a bordo de una zodiac y una moto de agua, llegaron hasta los surfistas y llevados a tierra firme.

Foto: elcomercio.com

Si quieres surfear Jaws y no eres de los afortunados que tiene barco, lo normal es que el camino hasta el pico sea largo y, a veces, peligroso.

Este fin de semana ha llegado una de las mayores marejadas en años en Hawai, y gracias a las cámaras de Surfline podemos disfrutar de estos momentos desde la comodidad de nuestros sofás.

Sucedió ayer en una ola muy parecida a la de Peter Mel, con la diferencia que el sudafricano no la pudo bajar.

Sucedió en octubre del año pasado, cuando una gigantesca marejada azotó toda Europa, dejando tremendas olas en Nazaré, Irlanda, y también en Belharra.